Nota: Artículo publicado originalmente en Claridad
Hace rato vemos cómo la discusión alrededor del desarrollo de un modelo socio-económico y de un proyecto de país abarcador, que tome en consideración los sufrimientos de las masas en Puerto Rico y que esté cimentado en nuestra realidad particular y en relación a la de otros pueblos, brilla por su ausencia en el discurso político prevaleciente. Lo que sí está presente es un gobierno que continúa reduciendo presupuestos y recursos al sistema universitario público, institución que provee varios de los elementos necesarios para la constitución de una alternativa ante el desmoronamiento social.